Testimonios

Antes, los días antes de cada reunión, sentía ansiedad antes de llegar al despacho, y en el despacho también. Veía a mi equipo y a los colegas como jueces, y me sentía pequeño delante de ellos o de algún director concreto. Dejaba de hacer algunas presentaciones por los nervios y el miedo escénico.

He conseguido lo que quería con el programa, incluso a nivel vital, he bajado el nivel de estrés del día a día. Los días antes de una presentación o reunión importante estoy tranquilo y bien, que para mí es lo más importante, y ya no me pongo nervioso.

Mi nivel como profesional es mucho mejor, puedo hacer más lo que quiero porque puedo prescindir de lo que digan, del juicio y puedo estar más centrado en lo que quiero hacer, porque trabajo con absoluta tranquilidad.

La experiencia ha sido muy gratificante, muy agradable, como si te conociera de toda la vida, me he sentido con mucha confianza, y muy bien. Y muy rápidamente en los inicios del programa recuperé contigo la ilusión, que es muy importante. Es una buena inversión, y lo recomiendo no solo a ejecutivos o directivos, sino a profesionales de empresa en general, porque es algo que te hace vivir mejor, y tener más calidad de vida. Vale la pena salir del pozo y dejar de dar vueltas, porque se puede cambiar.